- El objetivo es canalizar grandes cantidades de viajeros en períodos cortos
Madrid, 22 de mayo de 2023. El proyecto de la Intermodal de Santiago está un paso más cerca de completarse. Tras construirse la dársena de autobuses y la pasarela peatonal, ahora le toca el turno a la futura estación del AVE. El histórico edificio se completará con un vestíbulo superior, al que se accederá desde una plaza elevada sobre el aparcamiento actual. Con un plazo de 30 meses, el objetivo es que las obras, adjudicadas por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, a través de Adif AV estén terminadas para finales de 2024.
La construcción del recinto, que dará unidad a las estaciones de tren y autobuses actualmente conectadas por una pasarela, también contempla la ejecución de las obras de la terminal ferroviaria para su adaptación a la red de alta velocidad.
Para ejecutar esta obra de imponente envergadura, COPASA, y Taboada y Ramos, las constructoras encargadas de estas acciones, incorporan la metodología BIM (Building Information Modeling), una forma de trabajar que permite, entre otras ventajas, prevenir errores y evitar sobrecostes en el presupuesto inicial, dotado con 33,6 millones de euros.
La idea del proyecto es crear un inmueble “destinado a la comodidad y que ofrezca servicios que puedan necesitar todos los usuarios, independientemente de sus diferentes necesidades, actitudes y hábitos”, ya que, este tipo de edificios “han de poder gestionar grandes cantidades de viajeros en periodos cortos de tiempo, por lo que la concepción de los flujos es fundamental”.
El proyecto “integra perfectamente los edificios históricos con los nuevos espacios amplios y modernos”, sostiene Pablo Jose Talavera, BIM Manager de Copasa, en una entrevista para la consultora especializada Espacio BIM, para quien “poder colaborar en este proyecto es muy ilusionante”, más teniendo en cuenta “que tanto la propiedad, la dirección de obra y la asistencia técnica de obra creen en las bondades que puede aportar la metodología BIM”.
Cabe destacar que la metodología BIM es una revolucionaria forma de trabajo por la que cada vez apuestan más profesionales de los sectores de la arquitectura, la ingeniería y la construcción para proyectos de titularidad privada y, de hace un tiempo a esta parte, también pública, dadas sus múltiples ventajas. Entre ellas, están las de centralizar la información, anticiparse a posibles errores y evitar sobrecostes en el presupuesto. Precisamente para ello, ADIF propuso en la licitación de la construcción “entregar un modelo BIM del proyecto a modo de ‘as built’ de la estación”, un término que “hace referencia a los planos finales de obra y que consiste, en este caso concreto, en una maqueta digital con toda la información del proyecto, como tiempos, costes, etcétera”, explica Borja Sánchez Ortega, Director de Proyectos y Director del Máster BIM Manager Internacional (+VR) de Espacio BIM (espaciobim.com).